El día en que el Año Nuevo no llegó
Y un día, el año nuevo no llegó...
Millones y millones de personas estaban esperando, pero el
año nuevo no llegó, causando estragos, caos y angustia en todo el mundo.
¡El 32 de diciembre sí llegó! Y el 33, el 34... Bueno, fue
bastante extraño y algunas personas tomaron la iniciativa de intentar reiniciar
el calendario, pero otras no aceptaron, una nueva razón para la polarización.
El FBI, la CIA, la Interpol, la ABIN y muchas otras
organizaciones comenzaron a buscar el Año Nuevo, siguiendo pistas, pero sin
éxito. Y el tiempo iba pasando... hasta que la gente se olvidó del Año Nuevo y aceptó
este año extendido.
Cuando todo se calmó, una persona muy joven apareció en
algún lugar. Miraba al horizonte, apreciaba la puesta de sol de nuevo y
disfrutaba del momento.
A pesar de que se suponía que debería estar trabajando, pues
tenía que reemplazar a su antiguo compañero de trabajo, decidió no hacerlo.
Después de todo, ¿cuál era el punto? Muchos como él han venido antes y todos
terminaron muy viejos, amargados y desilusionados. De hecho, su decisión fue
tomada de camino a su oficina cuando tuvo la oportunidad de ver al que
estaba reemplazando...
¡No es posible! No se dejaría arrastrar por eso; después de
todo, él era el símbolo de la novedad y el cambio, la encarnación de la
esperanza y la renovación.
Pero suspiró... Sabía que no podía posponerlo para siempre.
Solo quería que la gente fuera más consciente de su
importancia, que aprovechara su presencia y se transformara.
Después de muchas horas, cerró los ojos ya cansado, pero
tomó sus cosas y se fue a la oficina.
Al día siguiente, comenzó el nuevo año... Tal vez con
esperanza.
¿Estás listo para cambiar? ¿Qué necesitas para hacer de
este nuevo año un año de esperanza, renovación y novedad?
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