Soltar y profundizar

Hay circunstancias con las que no deberíamos estar lidiando ya que nos duelen, nos recuerdan lo peor de otras personas y somos incapaces de disfrutarlas. No son parte de un camino de autoprogreso; por el contrario, pueden destruir nuestro sentido de propósito.

Y así, simplemente las soltamos, las dejamos fluir hacia aguas pasadas y avanzamos, de regreso a nuestro camino de autoprogreso.

Sin embargo, de vez en cuando, surgirá una situación en la que se puede aprender una lección. Incluso es posible que esa situación nos haga darnos cuenta de algo y cambiar. De vez en cuando, lo que deberíamos haber soltado... no deberíamos. Al contrario, debemos abrir nuestro corazón y profundizar en ella...

Tal vez usando la sabiduría o hablando con otras personas, somos capaces de discernir  cuál es cuál y  en momentos de tanta incertidumbre, ese discernimiento es aún más importante, porque si no soltamos, podemos arrepentirnos más tarde, y si no profundizamos, nos perderemos una lección valiosa.

En mi experiencia, hay una pregunta que me hago: ¿Qué tan necesario es para mí pasar por esto? Si comprendo que no es necesario, hago un esfuerzo por alejarme de esta circunstancia; si aprecio su importancia, me blindo  y me preparo para la tormenta que está a punto de venir.

Usa tu sabiduría y no abandones tu camino de autoprogreso.




Comentarios

Entradas más populares de este blog

Los vicios del alma

Todo lo que deseas está al otro lado del miedo

Como evitar las trampas del ego