Descubrir esa parte de ti mismo que está oculta, pero que otros sí lo saben
Hace muchos años, entré en contacto con el modelo de la Ventana de Johari. ¡Fue una gran realización!
Para aquellos que no lo saben, les sugiero que POR FAVOR investiguen
sobre eso.
El modelo proviene de la comprensión de que nuestras
cualidades, talentos, potenciales y todo lo que es valioso para nosotros
(llamaré a esto nuestro tesoro) se pueden distribuir en 4 áreas
diferentes de una matriz:
Un área que es conocida por ti y otros. La mayoría de la gente sabe que tienes ese tesoro en ti mism@ y es lo que puedes poner en tu CV sin pensarlo. Es natural y eso te dio tu puesto de trabajo o tus amigos.
Otra área es aquella en la que tu tesoro es conocido por otros, pero por alguna razón, no lo sabes. A menudo se debe a la duda en uno mismo o la falta de autoestima, pero los demás te reconocen por más de lo que piensas que eres. Los buenos gerentes y amigos te ayudarán a desarrollar esa parte de tu ser.
Lo contrario está en otro cuadrante de la misma matriz; tú conoces tus tesoros y otros no. Puede generar frustración, pero si lo manejas bien, ¡sorprenderá a los demás que tengas esa habilidad!
El último cuadrante es el más misterioso ya que corresponde a esa parte de tu tesoro que ni tú ni otros conocen. Aunque muchos considerarán esto un problema para uno mismo, de hecho es la garantía que todos tenemos de que siempre podemos cambiar. Siempre hay un potencial para explorar y nuevas experiencias para vivir, sin importar nuestra edad o condición.
¡Explóralo!
Pero me gustaría trabajar en aquellas partes que están
ocultas. Podemos llamarlas potenciales o semillas y por alguna razón son
invisibles, al menos para algunas personas, tal vez para nosotros mismos.
Primero, ¿por qué hay cosas que otros ven sobre nosotros que
no podemos ver?
OK, hay muchas cosas MALAS que otros ven que nosotros no,
pero de nuevo, me gustaría centrarme en esas cosas POSITIVAS: nuestra capacidad
para hacer una broma cuando las cosas están tensas, el hecho de que cocinamos
ñoquis muy bien, nuestro talento con los niños o el hecho de que sonreímos,
incluso cuando las cosas van mal.
Según mi experiencia, significa que no vemos nuestra propia
grandeza... Puede ser debido a dudas sobre el propio ser o simplemente
pensamientos muy negativos que, como horribles propietarios, desalojan
las sensaciones positivas de nuestras mentes.
La solución puede no ser fácil, pero es sanadora: hablar con
otras personas. Habla más.
Aprende de ellos lo que ven de ti. Sí, algunas cosas no
serán agradables de escuchar, pero otras serán ABSOLUTAMENTE MARAVILLOSAS.
Y cree en eso, en vez de esos horribles propietarios...
Tú y yo, y todos, tenemos mucho más internamente de lo que viene a los ojos,
incluso a los nuestros.
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