Priorizando la vida I

Actualmente, tengo demasiadas tareas.

Cuando hace unos años implementé un esquema de agenda casi perfecto, la vida era otra. Ahora, con tantas tareas, voy contemplando como manejar mi vida de una nueva manera.

Afortunadamente para mí, me gusta la organización y me gusta organizarme. Siento que no solamente ahorra tiempo, sino me permite usarlo de manera más eficiente y trabajar en otro ritmo. Así que en este blog, quiero compartir mi pequeño secreto organizacional actual: la priorización.

1. Tú eres único. Hay muchas "recetas" de como organizarse mejor y como priorizar las cosas, con innumerables técnicas y métodos. Mi sugerencia es que investigues, utilices ciertas herramientas por un tiempo, digamos, 3 meses, pero estés abierto y seas flexible para decidir por tu propio método. Toma incluso lo que comparto con cuidado y pruébalo.
2. Estudia un poco más sobre el poder de la priorización. De forma ingénua, una joven amiga decía: ya prioricé todo y decidí que no haré. No, no... Si priorizas algo, LO HARÁS. Si no vas a hacer algo, no lo priorizas, lo tiras al basurero. Así que tómate un tiempo para entender más el sentido de priorización.
3. Priorización y organización te ayuda en la vida, principalmente en el progreso espiritual. ¡SORPRESA! Si pensabas que prioridades son para gente "cerebro izquierdo", estás muy, pero muy equivocado. Hace muchos años recuerdo un gran artista brasileño compartiendo su técnica de creación y parte de esta técnica era entender cuando parar, algo fundamental en la organización. Lo que pasa es que probablemente personas con tendencias más humanistas tendrán técnicas distintas de personas más técnicas, pero priorizar y organizarse es clave para todo tipo de persona.
4. No todo se necesita priorizar. Fanatismos y excesos nunca han sido realmente positivos. Al comienzo, no podía hacer nada sin antes priorizar. Hoy en día, creé un sistema que permite mucha flexibilidad, sin que esa llegue a caracterizar la "flojera" de no querer organizarse.
5. Sin embargo, prioriza todo. Hummm... ¿Suena contradictorio? Tal vez. Para mí, no. Lo que quiero decir es que en mi método propio para priorizar, hay básicamente 3 "niveles" de priorización - estos niveles me permiten no priorizar todo: uno de los niveles se prioriza, otro no se prioriza solo se indica el día por realizarlo y el último dispone las tareas de manera cronológica. Pero, porque todo está dentro del esquema, estoy priorizando. ¿Entendiste? No... Bueno, bear with me, please.

En el próximo post, compartiré mi método. Un abrazo, Marcelo