La introversión del ser
Mucho se está hablando de la introversión. Después de todo,
el mundo fue prácticamente invadido por personas que desafiaron el antiguo
modelo del líder carismático, hablador y muy activo.

El introvertido es un científico cuyo laboratorio es su propia
mente, su cuerpo, su salón y habitación.
Para el introvertido, las demás personas hacen parte del
teatro de la vida igual que él, pero no siente dependencia o que otros dependan
de él, actuando de forma interdependiente. Ser introvertido no es por lo tanto
aislarse, no hablar con nadie o hacer lo que piensa, sin tener en cuenta lo que
otros dicen.
Él es el intérprete de sus propios pensamientos y
sentimientos, y no los expresa de forma barata. Cada palabra de una persona
introvertida es tan valiosa como un diamante sino por su valor en contenido, al
menos por el esfuerzo que esta persona puso en expresarla.
Bien utilizada, la introversión puede darte experiencias
únicas y preciosas, capacitándote a una mejor relación con el otro, al
relacionarte mejor contigo mismo. Es básico en la experiencia del yoga y de la
meditación, en una vida espiritual y entregada al mundo.
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