Siendo líder de ti mismo

El fracaso asusta a la gente. Esa es la razón por la que muchas personas deciden ni siquiera intentarlo, para no ser derrotadas, particularmente en la sociedad actual en la que vivimos. Al fin y al cabo, ¡vivimos en la sociedad de los SUPEREXITOSOS! Sí, todos muestran su éxito, sus logros y premios. Hace muchos años, hubo un video que se hizo viral sobre la vida según Facebook, mostrando a un hombre que estaba pasando por momentos difíciles y decidió engañar un poco, mostrando solo las mejores partes de su (fingida) vida. Mi mejor escena es cuando se hace un selfie después de correr muchos kilómetros, lo cual era falso ya que tomó el carro para ir allí... Todo se vino abajo después de que su esposa lo engañara y él comenzó a compartir su verdadero estado mental, y perdiendo a todos sus amigos... Eso significa que el fracaso es peligroso, significa que me dejarán sol@, ¡porque a nadie le gusta un@ perdedor@! Profundicemos en el fracaso: En primer lugar, está el fracaso real,

Hubo una época en que las personas solían preocuparse por su reputación en ciertas ocasiones, como una entrevista de trabajo, elegir a alguien para casarse o inversiones. La reputación es un indicador poderoso, lo cual es subjetivo, pero crea una referencia para que un jefe te contrate, planifiques tu boda con una determinada persona y una inversión familiar para el futuro de sus hijos. Sin embargo, algo sucedió en la historia de la humanidad, un avance de grandes proporciones en términos de cómo vivimos en una sociedad: la red social. Entonces, supongamos que estás tratando de conseguir un trabajo; una de las cosas que tu jefe puede hacer es revisar tus publicaciones y tener una idea general de quién eres. A pesar de que no están relacionadas con tu trabajo real, serán esas publicaciones (tu perrito, tu madre cayendo de una silla, un baile, etc.) las que podrían definir si lo conseguirás o no. Cuando tu jefe se reúna contigo para la entrevista, ya tiene una imagen de quién eres.

Un joven ministro comenzó a asistir a su exótico rey, quien solía citar frases sabias y hacer todo lo posible para gobernar el reino en una manera... ¡divertida! Una de las cosas que solía hacer el rey estaba relacionada con la ejecución de prisioneros, evento al que el joven tuvo que asistir con pesar. Siempre era lo mismo... - Has sido condenado por tus actos atroces contra el reino. - solía comenzar el rey. Después de algunas deliberaciones, terminaba su interferencia con esto: - Ahora, si eres valiente, REALMENTE valiente... Mi reino necesita gente MUY CORAJUDA y estoy dispuesto a perdonarte...   - el rey esperaba la sonrisa del prisionero y cerraba así su discurso, acercándose a una sencilla puerta en un rincón - ... si cruzas esta puerta. ¡Esta puerta lleva a una persona al lugar más horrible de mi reino, un lugar al que ni siquiera los mejores hombres de mi ejército se atreverían a ir! Esta puerta nos mantiene a salvo de un monstruo que nadie ha podido derrotar. - esta vez

Para tener una vida dinámica, llena de energía y significado, es importante entender que esta es la mejor universidad. A cada día, a cada momento, en cada interacción u oportunidad de contemplar, tú y yo estamos aprendiendo. Eso no tiene fin. Por lo tanto, me gustaría sugerirte dos cosas. Primero, siempre estés ABIERT@ A APRENDER. Esto requiere humildad y autoestima, amabilidad y valentía, y lo más importante, el profundo deseo de progresar. En segundo lugar, siempre estés ABIERT@ A COMPARTIR. Necesitarás sentir el pulso de la persona con la que estés compartiendo, enseñando, haciendo coaching o mentoría. Tendrás que ir más allá del conocimiento y confiar en tu propia sabiduría. Y compartir con generosidad, apertura, misericordia y amor. Estamos compartiendo esta misma aula, aprovechémosla al máximo.