Toda negociación empieza conmigo mismo
Hay muchas clases y técnicas de negociación, algo que ha asumido posición central en los negocios del mundo. Pero, del punto de vista espiritual, la negociación más compleja y más necesaria es la que hacemos con nosotros mismos. El ser vive en una guerra constante entre impulsos y la razón, entre los deseos y las necesidades, entre el estado presente y el deseado. Esa guerra tiene una característica negativa, pues el vencedor y el vencido tienen la misma cara y viven la misma vida… La armonía es el estado natural del ser, que corresponde a un equilibrio dinámico donde los poderes y cualidades interiores funcionan en la medida de la forma de vivir del individuo, sus talentos son utilizados de forma natural y los potenciales están en proceso de desarrollo. El camino de la negociación interior implica un proceso sencillo: Tener claro la convicción personal sobre el tema, es decir, cuál es el estado ideal para el ser. Comprender las limitaciones presentes que no permiten