Trabajo y hogar

¿Te sientes cansado, o cansada, después de un día intenso en el trabajo?

¿Te sientes cansada, o cansado, al llegar al trabajo, debido a las innumerables actividades de tu hogar?

Más allá del hecho de que nos hemos compartimentados, algo sobre lo cual ya he hablado, la realidad es que es importante y fundamental saber conciliar las dos actividades que terminan por ocupar gran parte de nuestra vida como personas. Y una tendencia fuerte en el mundo es el trabajo por parte de personas jubiladas, ya sea por ganar más dinero o simplemente para no caer en una rutina.

Si no conciliamos ambos, generamos un tipo de estrés que tiene consecuencias muy negativas. Ya sea que no lograremos concentrar en el trabajo, o desarrollaremos agresividad laboral, o bien cuidaremos la casa a gritos, sin la paciencia necesaria para construir algo tan delicado como un hogar.

Un truco rápido para hacer eso:

• Organízate más. Tómate un día por lo menos al mes para sentarte y organizar tanto las tareas y situaciones del hogar como las del trabajo. Esto implica planear, priorizar, empoderar, delegar y asignar. Haciendo esto, podrás reducir mucho de la tensión de ambos lados.
• Trabajo de equipo. Esa no es una expresión restricta al trabajo. Ya pasó la época de la "mamá lava todo", es hora que las madres compartan sus actividades con pareja e hijos. Igualmente, no es justo al esposo cargar con el título de "plomero profesional" si no lo es; los demás pueden ayudar a encontrar soluciones económicas y efectivas. Y los hijos, teniendo en cuenta el respeto a su edad, pueden ser educados en actividades sencillas, creando una consciencia de autonomía junto con igualdad de géneros.
• Acuerdos... Si hay equipo, puede haber acuerdos. En el trabajo, estos acuerdos pueden facilitar la solución de circunstancias hogareñas como la hija adolescente que tiene un serio problema, y en el hogar el famoso "trabajo de sábado". Los acuerdos son hechos con base en un saludable diálogo que acerca a todos.
• Flexibilidad de un barco. En términos de personalidad, es necesaria la flexibilidad de un barco que sabe adónde va, pero debe utilizar muchas herramientas para llegar allá. La rigidez no sirve aquí, pero es bueno recordar que todo barco tiene un ancla y esta debe ser fija. El ancla del presidente de una empresa con la que trabajé una vez era que siempre cenaba con sus hijos.
• Meditación y relajación. Aunque muchos creen que son sinónimos, no es así. A veces, se necesita meditar y un sinónimo puede ser EMPODERARSE. Por ejemplo, si quieres tomar una decisión clave para tu vida. Otras veces, lo único que necesitas es relajarse, como cuando has tenido un día física, mental o emocionalmente cansador. Para ambos, necesitarás un lugar apropiado para su práctica - al menos, silencio y nada de perturbaciones.

Vive la fabulosa aventura de trabajar y construir un hogar de forma eficiente y feliz.