Siendo mi propio héroe
Desde niño me han fascinado los héroes de todos tipos, de la
mitología o de comics, de libros y películas. Sin embargo, un día, me di cuenta
que yo era un héroe.
Pasé por muchas situaciones en la vida, de enfermedades,
problemas de relación, dificultades de toma de decisión, y un gran etc. Pero un
día, me di cuenta: Hey, ¿sabe qué? ¡Lo
logré!
No fue fácil, pero tampoco fue tan difícil, y no se termina
el proceso, pues como en las historias de héroes, siempre hay algo nuevo sobre
ti que vas descubriendo con el tiempo.
Entonces, ¿cuándo fue la última vez que experimentaste tu héroe interior?
Si hace mucho, conviene gritar muy duro SHAZAM! (en tu mente) y ver la magia ocurrir. Cuando eres un héroe,
todo lo puedes, no hay obstáculos que sean imposibles; en realidad, son entretenidos
y necesarios para tu mejor desempeño.
¿Qué esperas? Deja que ese héroe de tu corazón salga a vivir
la vida de Mujer Maravilla, trabajar como el Hombre Araña y ser tan feliz como
Namor (sí, ¡era un héroe!).
Comentarios