Sinceridad, con amor

Sinceridad genera una energía renovada en el aire, descontaminando relaciones y estableciendo una importante puerta de comunicación.

Pero también puede ser la causa de la destrucción de muchas relaciones, por eso la sinceridad puede ser conocida como la honestidad con dientes, y suele herir a muchas personas.

¿Quién no ha sido herido por esa cualidad? ¿A cuántos no hemos herido?

La sinceridad solo funciona cuando está acompañada por el amor, en una de sus formas. Entonces es motivadora, energiza y empodera. Como su nombre viene de la antigua práctica teatral de no usar máscaras (de cera), cuando así se hacía, el amor auténtico, la intención pura y cariñosa, es capaz de cambiar la vida de alguien más.

Si eres una persona sincera, haz el experimento de pensar en la otra persona con mucho amor, tener buenas intenciones y solo entonces, habla lo que sientes… Mira entonces el resultado en tu relación con el otro.

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