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Mostrando las entradas de febrero, 2013

Enseñar jugando

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Quiero compartir contigo algunos aspectos de mi vida profesional ya que cuando trabajamos en el propio ser, lo profesional y personal son parte de una misma perspectiva. Todos tenemos cuatro funciones básicas, y una de ellas es PRODUCIR. No solo me gustan los juegos, los uso como metodología para trabajar y hacer que las personas se den cuenta de lo que sucede en su vida de una manera metafórica. Mi experiencia muestra que las personas más fácilmente admiten ciertos comportamientos negativos en un juego sin mayores consecuencias, que en la vida laboral donde incluso podrían ser removidas de su cargo. De ahí, podemos llegar a un punto donde la persona incluso logre cambiar su comportamiento y fijar ciertos acuerdos para que este cambio se mantenga en el largo plazo. Este es uno de los resultados más fascinantes del aprendizaje a través de juegos, dinámicas o lúdica, comparado con el aprendizaje estático y catedrático, que también tiene su importancia en su momento. Hay ciertos a

La ley del karma, y cómo ser feliz

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Definitivamente, leyes no nos hacen felices, ¿verdad? Recientemente, Colombia publicó una ley de felicidad y este tema está circulando mucho por ahí. La pregunta clave es: ¿cómo una ley me podrá hacer feliz? Hay una ley sin embargo, que sí te puede hacer feliz. Es la más antigua de todas las leyes, siempre ha existido y nunca ha cambiado. Al reconocerla y conocerla, serás capaz de aumentar tu experiencia de felicidad. Entrego unos puntos sobre la ley de karma que pueden ayudar, basándome en la metáfora de un sembrador: En primer lugar, es fundamental comprender que la ley no es buena o mala. Ella existe para compensar todas nuestras acciones y mantener la eternidad. Si sientes que sufres, puedes asumir la responsabilidad por crear acciones que generen felicidad en el futuro. Recuerda que lo que siembres, cosecharás. Si el sufrimiento persiste, debes aprender a cosechar el "fruto instantáneo" a través de reconocer la semilla que sembraste y entender qué recibirás e

El Creador

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Si vas a cualquier lado del planeta, encontrás aspectos que prueban la cercanía de la especie humana. Uno de ellos es la creencia en un Creador. En algunos lugares, será un ser gigantesco, en la forma de un anciano; en otros, un pájaro o algún otro animal, o simplemente la tierra, pero en todas partes del mundo, un memorial del Creador está presente. ¿Y qué tiene eso que ver con mi vida personal? Hace muchos años, alguien me enseñó una poderosa herramienta para entender el mundo. Recuerdo que en esta época pasaba por una crisis; la mera enseñanza me ayudó a retomar energía y cambiar mucho de mi perspectiva del mundo. Es tan fácil, mira: En una hoja blanca de papel, pon un punto un poco a la izquierda. Este punto eres tú, enfócate en él y piensa en las cualidades y características de este punto, de ti mismo. Al lado derecho del punto en una misma línea imaginaria, dibuja otro punto. Este punto representa tu vida, contempla un poco sobre qué significa para ti esto. Ahora di

El alma y la materia

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Tú también puedes trabajar sobre esta idea. Siéntate en un lugar solitario, si deseas pon una música tranquila y conéctate con el alma que eres, dejando que toda esa paz, felicidad y amor fluyan por todo tu ser. No importa donde vayas en el mundo, encontrarás un concepto que se repite de cultura en cultura: la idea de que somos algo más que el cuerpo. Ese concepto se presenta de varias formas: el alma como el verdadero ser y el cuerpo como su vehículo; alma, cuerpo y espíritu creando quienes somos; el alma como algo externo que puede ser separado del ser, etc. Particularmente, nunca pensé sobre eso. Sí, siempre creí que había algo más. Siempre creí desde que tengo el poder de razonar, que había algo más, distinto al cuerpo, pero nunca había tenido una idea tan clara como cuando entré en contacto con Brahma Kumaris. Aún recuerdo mi regreso a la casa donde no podía parar de pensar en esa idea maravillosa: yo soy un alma. Este cuerpo increíble que tengo es mi vehículo. Esta relac