¿De nuevo a la India?
Bueno, sí, viajo de nuevo a la India. Domingo tomo el avión y unas 26 horas después, llego a este país que considero una mis primeras patrias (junto con Brasil y Colombia). Pero, ¿por qué? Me hago esta pregunta de forma fuerte. En primer lugar, porque hay algo allá que me atrae. Es un encuentro conmigo mismo, con Dios y mi familia humana en su estado mejor - allá, los veo como ángeles, pues es esto que los sitios adonde voy inspiran en los demás. Segundo, me recuerda la antiguedad humana. La India es tan antigua, de ahí sus contrastes tremendos, la pobreza y riqueza, idiomas y religiones, estilos de vida y muerte. ¡Tanta gente! Tercero, me recuerda una época dorada de la humanidad. Cierta vez, viajé a Ajmer, donde hay un templo (el Templo Dorado, de los jainistas). Ahí, existe una maqueta que ocupa al menos dos pisos de un edificio y muestra claramente como un día debemos haber vivido. Todos. Cuarto, me da la oportunidad de servir el mundo. Una persona que vive en la India decía que si