Ya casi llegamos...

Me imagino el carro del tiempo lleno de niños pequeños preguntando: "¿Ya llegamos?"

Y el tiempo, siempre paciente, responde con una sonrisa: "¡Todavía no!"

Como seres humanos, siempre estamos en un viaje. Incluso cuando no nos estamos moviendo físicamente, estamos viajando a lo largo de la línea de tiempo de la vida. ¿Ya hemos llegado?

He estado reflexionando sobre esta pregunta y me he dado cuenta de que hay tres destinos importantes en la vida, tres momentos en los que sentimos que realmente hemos llegado. Exploremos estos momentos juntos, tal vez alivie algo de la ansiedad que sentimos en el carro del tiempo.

 

Empecemos por el final. La muerte es un momento que todos estamos destinados a encontrar. Ya sea que la enfrentemos conscientemente, con alegría o con miedo, es la conclusión final de nuestro viaje. El carro del tiempo últimamente nos deja en algún lugar final, en algún lugar especial.

¿Cómo percibes esta inevitable conclusión desde donde te encuentras hoy?

 

Ahora, retrocedamos a la primera vez que nos encontramos con nuestro propio sentido de "yo". Ese momento en el que nos dimos cuenta de nuestra individualidad, separados de nuestra familia, nuestra comunidad y el mundo que nos rodea. Fue el comienzo de la comprensión de nuestra singularidad, el momento en que comenzamos a notar las diferencias y aprendimos a manejarlas. Fue como izar una bandera en la cima de una montaña al principio de nuestro viaje humano.

Por lo que recuerdas, ¿cómo fue para ti?

 

Ahora, TODOS en el mundo tienen un... ¿cómo debo llamarlo? Un momento de la verdad... Hace muchos años, un amigo compartió una poderosa analogía sobre la vida: ¿Qué pasaría si todo lo que has pasado fuera una capacitación? Este es el momento en que la vida hace clic; de repente, ves cómo tus experiencias, decisiones, luchas y triunfos estaban interconectados. Los recuerdos, los arrepentimientos, las razones, el amor y la paz se unen para formar un cuadro claro.

¿Cuál fue tu momento de la verdad?

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Los vicios del alma

Como evitar las trampas del ego

¿Qué hacer cuando pierdes todo?